Los hilos del destino capítulo 1

 ¡Hola!

Como anuncié en mis redes sociales. Cada viernes iré subiendo un pequeño capítulo de esta novela corta. La escribiré sobre la marcha así que no estará ni repasada, ni pulida😅 no me lo tengáis en cuenta. Espero vuestros comentarios que me ayudarán a crear esta historia que ni idea tengo de cómo acabará 😄. Ya os dejo con el primer capítulo.



Capítulo 1

 

La fiesta contaba con al menos cien personas en la que Dani se encontraba totalmente fuera de lugar. No obstante era su obligación estar allí, así se lo había hecho saber su tía, que era más bien como una madre, tras perder a la suya cuando tenía seis años. Su padre pasaba largas horas trabajando y tan solo lo veía los fines de semana. Nunca volvió a casarse. Hacía un año que también se había ido de este mundo, recordaba aquellos días vividos con él con alegría ya que había sido un padre cariñoso a pesar de sus ausencias. Le había legado una pequeña casa cerca de la costa donde solían veranear en vacaciones y un apartamento en la ciudad, donde vivía actualmente.

Su tía por el contrario era bastante adinerada, su marido había heredado de su familia una empresa que a su vez era poseedora de muchas más, y una gran fortuna que ahora manejaba su primo. Les encantaba las grandes fiestas y eventos sociales, algo a lo que él no estaba acostumbrado.

Hoy le daría el gusto de asistir pues el día era demasiado importante como para perdérselo. Sin embargo, tenía pensado marcharse pronto.

Mientras ojeaba a la multitud, que no conocía, la vio. Llevaba un vestido negro de tirantes muy finos que ceñía su cintura y luego caía con un pequeño vuelo hasta sus rodillas. Llevaba unas medias negras y calzaba unos zapatos de salón con tacón de al menos diez centímetros. Sonreía a derecha e izquierda mientras saludaba a todo aquel con el que se tropezaba en su camino. Su piel era blanca y su cabello moreno, sus labios curvados en todo momento invitaban a reír con ellos.

Parecía que tenía prisa en cruzar toda la sala, pero la gente se lo impedía. Así que, en un acto de caballerosidad, decidió echarle una mano. Se dirigió hacia ella con pasos firmes y la tomó del brazo sin previo aviso. La sorpresa de ella se vio reflejada en sus ojos verdes como aceitunas ya que no pudo articular palabra alguna.

—Perdona que te interrumpa, pero te andan buscando —le dijo él, después se dirigió a sus admiradores—. Lo siento mucho, debo llevármela.

Cuando ya se habían alejado unos pasos, ella se atrevió a soltarse de su brazo.

—Creo que eres el único invitado al que no conozco.

—Disculpa que te cogiera así, sin presentarme siquiera, es que desde el otro lado parecía que necesitabas ayudar para cruzar la sala.

—La verdad es que sí la necesitaba. —Dicho aquello, él escuchó el sonido más bonito del mundo, su risa—. Gracias.

—No hay de qué. ¿Adónde quieres que te lleve?

Ella volvió a cogerse de su brazo y le miró con ojos risueños y en ese momento lo supo, esa era la mujer de su vida. Tantos años picando de flor en flor sin imaginar que ese día llegase, pero ahí estaba, Cupido había clavado una flecha en su corazón. La emoción y la ilusión del amor le hicieron perder ese miedo que, año tras año, se instalaba en su mente pensando que nunca se enamoraría, que siempre estaría solo.

—A la puerta principal, me esperan allí.

—A sus órdenes, señorita.

—Qué caballero —rio encantada—. ¿Cómo te llamas?

—Daniel, pero todos me llaman Dani.

—¿Dani? ¿El primo de Juanjo?

—Sí, veo que sabes de mí.

—Pues claro, tenía muchas ganas de conocerte. Yo soy…

—Hola mi amor, veo que ya conoces a Dani —comentó Juanjo que había llegado hasta ellos. Se acercó a la chica que todavía colgaba del brazo de Dani y la besó tiernamente en los labios.

Dani los miró estupefacto, mientras veía a la mujer de su vida cómo se soltaba de él para agarrar el brazo de su primo. No podía ser, no podía tener tan mala suerte. El destino no podía estar jugándole esta mala pasada.

—Acabamos de conocernos, tu primo me ha rescatado de una muchedumbre.

—Gracias Dani por traer a mi prometida sana y salva.

—Claro, así soy yo —trató de sonreír.

—Por cierto, soy Miriam.

—Mucho gusto. —Le dio un apretón de manos y dio media vuelta para marcharse lo antes posible de allí.

—¡Eh, Dani! —lo llamó Juanjo y su primo apenas giró la cabeza—. No te vayas muy lejos, estamos a punto de la pedida de mano.

—No te preocupes, ahí estaré. A tu lado, como siempre.

Juanjo asintió con la cabeza y le vio perderse entre la gente.

—Tu primo es de lo más extraño —comentó ella notando el gran cambio que había dado su personalidad en tan solo unos minutos.

—Te caerá genial en cuanto le conozcas mejor. Soy hijo único y él es mi hermano, ¿lo entiendes?

—Por supuesto, por mí no te preocupes. Es raro, pero me ha caído muy bien.

—Gracias, amor.



Capítulo siguiente:

Capítulo 2



Comentarios

  1. Me ha gustado, pero que faena enamorarse de la misma mujer. Veremos por donde sale, tanto Dani cómo ella.

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  2. Odio los triángulos amorosos (sufrí mucho con el de Tessa y Will 😥) ahora me mucha tristeza Dani! Así que no me perderé ningún capítulo para ver cómo acabamos 😁

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    1. Yo también los odio, todavía no entiendo cómo ha surgido este jajaja. (También sufrí mucho con Tessa y Will)

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